domingo, 1 de enero de 2012

Happy New Year~

"Las campanas anunciaban el nuevo día, del nuevo año. Hacía tan solo unas horas mi corazón se había agitado de una forma tremenda y me habían hecho actuar sin pensar; no a mal, simplemente sin pensar. Todo había pasado muy rápido. Era... Era como si, de alguna forma u otra, todo por lo que había luchado, y que pensaba que por alguna razón u otra se desmoronaba hubiese resurgido de nuevo. Hubiese vuelto a nacer. Eran sensaciones que sabía haber sentido anteriormente, pero que jamás pensé que volvería a sentir. Iguales que aquella vez, sin duda.
Miraba el cielo estrellado desde la ventana, asimilando todo aquello. Las estrellas brillaban como si supieran lo que estaba sucediendo, como si supieran mis sentimientos, me envolvían con su luz, a mí y el interior del lugar en el cual me encontraba.
Mi hijo se acercó a mí en silencio y me miró con unos ojos tan profundos y llenos de emociones tan desconocidas para él, que me conmovió. Lo cogí en brazos y dejé que mirara conmigo las estrellas, mientras él se acomodaba en mi pecho como años atrás, cuando era más pequeño. Cerré los ojos un instante y volví a mirar las estrellas.
Sí... Muchos años habían pasado. Mi historia, tan larga y complicada como pueda serlo cualquiera, había estado llena de altibajos, de momentos buenos, de momentos malos... Recuerdos que sabía que jamás podría olvidar. Y ahora que esto, este momento, se repetía... No sabía cómo sentirme. Pero sí sabía que lo haría lo mejor que pudiese, y que actuaría de la forma que creyese ser la más correcta.
Y sumido en mis pensamientos, del pasado y el futuro, escuché unos pasos acercarse a mí; así que me giré, y observé a la persona que tenía en frente, esperando algún tipo de señal, de movimiento o sonido, que me hiciese reaccionar.
Tardó un poco en inmutarse, y eso me inquietó levemente, pero cuando asintió con una sonrisa, mirándome a los ojos, no pude más que emocionarme. Fui por los pasillos con mi hijo en brazos y entré en una habitación cuya iluminación no era abundante, pero tampoco escasa. No era pequeña, pero tampoco enorme. Tenía lo suficiente y, aunque era un lugar no simple, pero común en algunos aspectos, me pareció como si reviviese de nuevo recuerdos del pasado, como si aquel lugar, pudiese despertar en mí multitud de sensaciones.
Y allí en frente estaba ella, tumbada, mirándome y sonriendo, sin terminar de creerse, al igual que yo, lo que acababa de suceder.
Entré pues, intentando dominar la multitud de sensaciones que mi cuerpo generaba, con mi hijo al lado. Nos acercamos, y aunque ninguno dijo nada, en aquellos momentos no eran necesarias palabras para expresar lo que sentíamos, pues todos nosotros, sentíamos lo mismo.
Los cuatro.
Le pasé un brazo alrededor a mi esposa, que recostándose en mí con la pequeña criatura que acababa de nacer entre sus brazos, derramó aquellas lágrimas que mi cuerpo retenía en mi interior contra su voluntad. Y en aquel uno de enero, con aquella noche estrellada que nos rodeaba a todos como en un pequeño sueño, mi hijo dijo aquellas palabras, que aunque comunes y monótonas sonarían normalmente, me parecieron las palabras más bellas que podrían expresar aquel momento.
-Feliz año nuevo."

Pues lo dicho, Feliz Año 2012 a todos (:

Saludos.
Kassi.

3 comentarios:

  1. De momento solo he leído esta entrada, tiene buena pinta te pondré en mi lista del Reader!!

    FELIZ AÑO NUEVO!!!

    ResponderEliminar
  2. Qué bonita! :3 Es muy emotiva y especial Kassi. Me gussssta.
    Bueno, espero que igual que el protagonista de este relato, todos empecemos con buen pie el año. Feliz 2012!

    ResponderEliminar
  3. Bueno Kassi, muy bonita y conmovedora entrada :)
    Que tengas un feliz año (otra vez :P) y eso, que seas feliz.

    ¡Feliz año!
    Saludos

    ResponderEliminar